El PP obtiene la mayoría absoluta y el PSOE se hunde. ¿Y ahora qué?

Los españoles han dado en estas Elecciones Generales del 20 de noviembre la mayoría absoluta para que gobierne el Partido Popular, con el 44,62% de los votos y 186 diputados; mientras que el PSOE se hunde electoralmente al obtener el 28,73% de los votos y 110 diputados. El PP ha obtenido 552.683 votos más que en las anteriores elecciones generales del año 2008; y el PSOE ha perdido 4.315.455; cabe destacar el aumento de los votos de Izquierda Unida, con 710.864 votos más que en las anteriores elecciones generales y el aumento de 834.163 votos de UPyD; el resto de los demás partidos han aumentado en 786.896 votos. Los votos nulos se han incrementado en 152.310 votos y los votos en blanco en 46.913 votos, mientras que las abstenciones se han incrementado en 538.035 votos. La participación de los ciudadanos en estas elecciones ha sido inferior al de las pasadas elecciones generales, si el numero de votantes en las pasadas elecciones fue de 25.900.439, en estas elecciones ha sido de 24.590.557, es decir, 1.309.882 votantes menos; teniendo en cuenta además, que el censo electoral se ha incrementado en estas elecciones en 703.436 ciudadanos con derecho a voto.

Realizando un rápido análisis de estas Elecciones Generales podemos llegar a la siguientes conclusiones: no ha habido un trasvase significativo, en términos generales, de votos del PSOE al PP; lo que si ha habido es un enorme trasvase de votos del PSOE a otros partidos políticos de izquierda y centroizquierda, además de aumentarse ligeramente los votos nulos, en blanco y las abstenciones.

Es más que evidente el desencanto y la desafección de los tradicionales votantes del PSOE hacia nuestro partido. La crisis económica y el alto nivel de desempleo le han pasado factura al PSOE. El negar la crisis económica al inicio de la misma, la falta de medidas efectivas  para intentar superarla y las reformas y recortes sociales que ha llevado a cabo el Gobierno Socialista para poder costear el incremento de la deuda pública, haciendo recaer el coste de la misma  en las clases medias y trabajadoras y no en las clases altas que son las que más riqueza acumulan, han generado una fuerte indignación entre los ciudadanos que han motivado el castigo al PSOE en estas Elecciones Generales.

Los ciudadanos, democráticamente en las urnas, han entregado todo el poder al PP. A partir de ahora el PP puede legislar, si quiere, sin pactos ni acuerdos con los demás partidos políticos presentes en el Parlamento español, para llevar a cabo su programa electoral, oculto o no, eso lo veremos en el devenir del tiempo. Los que siguen creyendo que la salida de la crisis y la generación de empleo está en manos del PP, pueden equivocarse, la salida de la crisis no se sabe en manos de quien está. Mientras tanto, los mercados han subido la prima de riego española y se está produciendo la caída de la bolsa española. La presión de la troika (CE, BCE y FMI) sobre el Gobierno de España se irá incrementando día a día hasta que consiga sus objetivos, ya lo han hecho con Grecia e Italia; las reformas y los recortes sociales consagrados en el llamado Pacto del Euro son sus objetivos.

Mientras tanto, en el PSOE deberemos de hacer una autentica autocritica y una reflexión profunda para orientar el futuro de nuestro partido. Las políticas social-liberales que se han venido practicando en estos últimos años no han obtenido el favor de nuestros votantes, urge que recuperemos las políticas socialdemócratas si queremos que los ciudadanos nos vuelvan a otorgar su confianza, tras la travesía por el desierto. La economía mixta de mercado, consagrada en la Constitución Española, es la recta.

Elecciones Generales, 20 noviembre 2011

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